¿Qué elegir: botas de montaña o zapatillas de trekking?
¿Qué elegir: botas de montaña o zapatillas de trekking?
Si estás pensando en renovar tus botas de trekking, es posible que te hagas la pregunta de ¿qué es mejor las botas de montaña o las zapatillas de trekking? En este artículo queremos explicarte las diferencias entre unas y otras, así como ayudarte a decidir lo que te vaya a ir mejor en función de tu actividad.
El primer paso para tener en cuenta en el momento de elegir calzado de montaña es tener claro el uso que vamos a darle. Parece algo obvio, pero es muy importante que te hagas las siguientes preguntas si quieres acertar con tu elección:
Una vez tengamos claras las respuestas a estas preguntas, vamos a desgranar los diferentes tipos de calzado y sus puntos fuertes.
Las botas de trekking son un clásico para los amantes de la montaña. Si buscas un calzado robusto y resistente, las botas siempre son una buena opción ya que es muy posible que te duren más tiempo que las zapatillas de trekking si las cuidas bien.
Actualmente, las botas de montaña se fabrican con materiales mucho más ligeros que hace unos años, además de integrar tecnologías que reducen bastante el peso del calzado. Aún así, el peso de las botas de montaña siempre suele ser mayor que el peso de las zapatillas de trekking. Para aquellos que prefieren notar peso en sus pies que les dé una mayor estabilidad sobre el terreno, las botas de montaña son una opción genial.
Otro aspecto importante es que las botas de montaña protegen mejor el tobillo en terrenos complicados. Esto facilita que, por ejemplo, se reduzca el riesgo de rozaduras en el tobillo y en invierno, es más complicado que la nieve entre en el interior del calzado.
Referente al tema de la nieve, las botas abrigan más el pìe en invierno, por lo que si buscas un calzado para invierno o que puedas utilizar todo el año, las botas de montaña son tu opción.
Existen diferentes tipos de botas de montaña según la actividad que vayas a realizar.
Botas de montaña rígidas: Son botas con suelas de montaña sin apenas flexión. Están pensadas para terrenos muy técnicos y expediciones alpinas ya que te permiten llevar camprones automáticos. Al ser un calzado tan rígido, el crampón es complicado que salte.
Botas de montaña semirrígidas: Estas botas de montaña tienen algo de flexión pero son bastante rígidas. Permiten el uso de crampones semiautomáticos y pueden utilizarse en rutas alpinas en las que no hay demasiada nieve ya que son más cómodas para caminar que el modelo anterior.
Botas de montaña flexibles: En este caso son botas de trekking pensadas para rutas de montaña y media montaña en las que necesitas un calzado que te proteja el pie pero que tenga una buena flexión al caminar. En caso necesario, pueden utilizarse crampones de correa, ya que no saltan con la torsión.
Cada vez más personas optan por pasarse a las zapatillas de trekking en lugar de las botas de montaña. El motivo principal es que es un calzado más ligero que las botas de trekking y actualmente prácticamente suelen contar con las mismas prestaciones técnicas.
Las zapatillas de trekking suelen estar fabricadas con tejidos más transpirables que las botas de montaña. Por ese motivo son una muy buena opción como calzado de montaña para el verano. Liberan más el pie que las botas de montaña, por lo que si tu idea es utilizarlas para rutas de senderismo o excursiones de fin de semana, son una excelente opción.
A nivel de protección frente al agua, existen diversos modelos de zapatillas de trekking impermeables, que están fabricadas con una membrana Gore-Tex y que puedes utilizar los días de lluvia ya que el pie está bien protegido.
¿Vosotros sois más de botas o zapatillas de trekking?
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